Tratamiento de agua y aguas residuales

El agua es uno de los elementos clave de nuestra vida cotidiana. Es vital para el funcionamiento de una amplia variedad de organismos vivos en la Tierra. El acceso continuo a este recurso es necesario para fines sanitarios y de subsistencia, en la producción vegetal y alimentaria o la cría de animales, y debe satisfacer requisitos de calidad específicos según su uso final. Sin agua, no sería posible llevar a cabo la mayoría de los procesos tecnológicos en muchas industrias.

A pesar de la naturaleza renovable de los recursos hídricos, estrechamente vinculada a las precipitaciones, el continuo aumento de la contaminación, sumado a la ubicación errática de sus fuentes, ha provocado que ciertas zonas del mundo sufran escasez de agua. Además, el constante crecimiento demográfico genera una creciente demanda de agua. Por lo tanto, es fundamental mejorar continuamente las tecnologías de depuración de agua y aguas residuales para permitir el uso más eficiente de este recurso natural.

Tipos de contaminaciones y métodos de eliminación

El agua cruda (sin tratar) contiene elementos naturales y diferentes tipos de componentes introducidos como resultado de la actividad humana, incluyendo en particular sustancias químicas peligrosas como fertilizantes, pesticidas, derivados del petróleo o metales pesados. Puede contener contaminación microbiológica, así como diferentes tipos de compuestos orgánicos e inorgánicos, como iones, sedimentos, coloides y suspensiones. La alta calidad del agua se obtiene mediante procesos de purificación, cuyo objetivo es mejorar sus parámetros mediante diversos métodos. Un elemento inherente al uso del agua son las aguas residuales (industriales, agrícolas, domésticas y municipales) derivadas de diversos procesos relacionados con la actividad humana. Las aguas residuales son altamente perjudiciales para el medio ambiente natural y, por lo tanto, es necesario realizar procesos de purificación adecuados. Este procedimiento garantiza que dejen de ser peligrosas después de su eliminación en tanques adecuados.

Hoy en día, la eliminación de aguas residuales y la purificación del agua representan un gran desafío para un número cada vez mayor de ciudades, fábricas, plantas y hogares en todo el mundo. Los métodos de tratamiento físico, como la floculación, la filtración y la adsorción, no siempre permiten proporcionar agua potable de calidad adecuada, que debe cumplir requisitos particularmente restrictivos. Por lo tanto, la eficiencia de estos procesos requiere la aplicación de productos químicos profesionales , especialmente en las etapas de purificación aplicables a la contaminación biológica y química.

Desinfección del agua

El cloro , el hipoclorito de sodio y la lejía sódica (hidróxido de sodio) son productos químicos clave ampliamente utilizados en la desinfección de tomas e instalaciones de agua. Estas sustancias son eficaces en la purificación de agua potable, principalmente eliminando la contaminación microbiológica. Dependiendo de su uso, los parámetros del agua se especifican en las normas y regulaciones pertinentes, por lo que los productos destinados a este mercado cuentan con los certificados necesarios y la certificación PZH.

Tratamiento de aguas industriales

El portafolio de productos del Grupo PCC también incluye soluciones destinadas al tratamiento de aguas industriales. Los fosfonatos bajo el nombre comercial de Roclean están dedicados particularmente a este mercado. Debido a una muy alta capacidad de complejación de iones, estos productos se utilizan para eliminar cationes metálicos como Ca, Mg, Fe, Cu y Zn . Además, previenen eficazmente la corrosión y ayudan a controlar la sedimentación en sistemas de refrigeración por agua, calderas y sistemas de agua de calderas incluso a bajas concentraciones. También se utilizan con éxito en circuitos cerrados de agua en campos petrolíferos. Otro grupo de productos ofrecidos por el Grupo PCC son aditivos especializados bajo el nombre comercial de Rokrysol . Rokrysol WF1 es un floculante sintético de naturaleza no iónica que acelera la sedimentación de suspensiones de agua. Rokrysol WF2 S , un floculante aniónico sintético, apoya los procesos de espesamiento y clarificación de suspensiones inorgánicas, especialmente aquellas que contienen hidróxidos metálicos y otras partículas con carga positiva.

Preparaciones antiespumantes

Durante el tratamiento de aguas industriales derivadas de procesos que requieren la aplicación de sustancias espumantes (producción de pulpa, cosméticos, productos farmacéuticos, alimentos o metalúrgicos), la extinción de espuma es una de las etapas de purificación. En el proceso se utilizan agentes antiespumantes a base de aceites de silicona, como EXOantifoam S100 . Una alternativa a las fórmulas a base de silicona es Tensiantifoam , una mezcla cuidadosamente equilibrada de sustancias antiespumantes y de baja formación de espuma, diseñada también para eliminar la espuma generada en los procesos industriales. La gama de productos también incluye la serie ROKAmer , copolímeros en bloque de óxido de etileno y propileno de baja formación de espuma, que pueden ser un componente de fórmulas de extinción de espuma destinadas a su uso en contacto con alimentos. Estos productos cumplen con los requisitos de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) con respecto a los aditivos utilizados en el procesamiento de alimentos.

Productos para circuitos de agua de calefacción

El agua también es un medio de transporte en las instalaciones de calefacción, donde su uso seguro y eficiente depende principalmente de la calidad del agua que alimenta las calderas (agua de alimentación de calderas) y que circula por los circuitos de calefacción (ciclos de agua de calefacción). Debe cumplir los requisitos establecidos por los fabricantes de calderas, determinados por la estructura de los depósitos y la presión dentro del circuito. El cuidado de la instalación y una corrección química adecuada reducen significativamente los costes de mantenimiento de la red de calefacción y las pérdidas derivadas de las paradas. Estas precauciones garantizan la continuidad del suministro energético, aumentando la fiabilidad del sistema y limitando los gastos de reparación.

El requisito clave referente al agua en sistemas cerrados de calefacción es la ausencia de acción corrosiva en los elementos de la instalación o la aparición de cal. El factor corrosivo básico es el oxígeno diluido en agua y por lo tanto es importante aplicar agentes correctores que se unan a este componente. La oferta del Grupo PCC incluye productos basados ​​en carbohidrazina bajo el nombre comercial de Tensamin CH6 y Tensamin CH11 , que son responsables de la corrección del pH, la desoxidación y la pasivación . Estas preparaciones proporcionan sustitutos seguros y no tóxicos para la hidrazina generalmente aplicada. Una alternativa para estos productos es Tensamin EC , que es una mezcla de surfactantes alcalinos cuidadosamente seleccionados. La preparación tiene propiedades anticorrosivas, dispersantes y que previenen la formación de cal. Por lo tanto, se aplica ampliamente en circuitos de agua-vapor y agua de calefacción. Está particularmente dedicado y recomendado para instalaciones de calefacción completamente nuevas.

Un producto recomendado para la corrección del agua de calefacción es Tensamin PK, que contiene dietilohidroxiloamina ( DEHA ). Este compuesto tiene la capacidad de unirse químicamente al oxígeno a temperaturas relativamente bajas (aprox. 60 °C), lo que garantiza la protección anticorrosiva . Además, las soluciones DEHA crean una película sobre las superficies, lo que convierte a Tensamin PK en un agente anticorrosivo ideal para el mantenimiento de calderas durante las paradas. La serie Tensamine también incluye preparados que previenen la formación de cal, como Tensical , una fórmula ácida que contiene un inhibidor de corrosión, recomendado para la eliminación de cal de tuberías, bombas e intercambiadores de calor.