Para proteger la salud humana y el medio ambiente frente a diversos tipos de peligros, la Unión Europea impone una serie de obligaciones a la industria para limitar el riesgo de que ocurran. Uno de los conjuntos de dichas ordenanzas es el Reglamento REACH. ¿Cómo afecta a la industria química? ¿A qué obliga a los fabricantes de sustancias químicas? Puedes leer todo sobre esto en el siguiente artículo.
Reglas principales del Reglamento REACH
El Reglamento REACH se refiere al Registro, Evaluación, Autorización y Restricción de Productos Químicos. Si la empresa produce o importa al menos una tonelada de producto químico por año dentro del EEE (Espacio Económico Europeo), debe informar ese hecho a la base de datos REACH. Las sustancias que no están registradas no pueden comercializarse ni utilizarse. El reglamento se aplica tanto a los productos químicos que son necesarios para los procesos industriales, como a los que usamos todos los días. Las disposiciones impuestas por REACH se refieren a:
- productores , que producen productos químicos, pero también los venden directamente o los suministran a otras empresas,
- importadores , que compran sustancias individuales, mezclas o artículos terminados, como artículos de plástico , muebles o ropa fuera de la Unión Europea,
- distribuidores responsables del almacenamiento y posterior comercialización de productos químicos,
- usuarios , que utilizan productos químicos o mezclas de sustancias químicas en su trabajo o proceso productivo.
REACH es responsable de las nuevas normas que permiten la comercialización de sustancias individuales, mezclas de sustancias o aquellas utilizadas en productos. Estas normas y reglamentos relacionados tienen por objeto garantizar que la industria sea responsable de :
- gestión de todo tipo de riesgos para la salud y el medio ambiente relacionados con el uso de productos químicos,
- proporcionar información de seguridad detallada para todos los usuarios de la cadena de suministro.
¿Cómo funciona REACH?
El Reglamento REACH establece procedimientos que requieren la recopilación y evaluación de información sobre las propiedades y peligros de los productos químicos. Registro de empresas en la ECHA (Agencia Europea de Sustancias Químicas). Aquí es donde se aceptan los registros individuales y se evalúa su cumplimiento, mientras que los estados miembros de la UE evalúan los productos químicos seleccionados para aclarar las preocupaciones iniciales sobre los riesgos para la salud humana y el medio ambiente. Los comités científicos y los órganos de la ECHA evalúan si la gestión de riesgos de estas sustancias es aceptable. De no ser así, las autoridades competentes podrán imponer una prohibición sobre el uso de las sustancias peligrosas. También es posible solo limitar su uso o condicionarlo a un consentimiento especial previo.
Funciones de las empresas bajo el Reglamento REACH
El Reglamento REACH tiene un impacto en el funcionamiento de empresas de muchos sectores diferentes, no solo el químico. REACH brinda a las empresas la posibilidad de cumplir uno de los siguientes roles:
- productor : fabricante de productos químicos para uso personal o para uso de otras personas (incluida la exportación),
- importador : es probable que las empresas que compran productos fuera de la UE/EEE estén sujetas a algunas de las obligaciones previstas en el reglamento. También pueden referirse a sustancias químicas individuales, mezclas o productos terminados destinados a su posterior venta,
- usuarios intermedios : personas que, en sus actividades industriales o profesionales, entran en contacto con productos químicos y están obligadas a comprobar cuál de los reglamentos REACH se les aplica,
- empresas con sede fuera de la UE : estas son empresas que no tienen obligaciones bajo REACH, incluso cuando exportan sus productos al territorio aduanero de la Unión Europea. En este caso, las obligaciones de registro derivadas del reglamento se transfieren a los importadores con sede en la Unión Europea o al representante único de un fabricante extracomunitario con sede en la Unión Europea.
Cualquier regulación resultante del Reglamento REACH y el cumplimiento por parte de las empresas es una condición clave para la protección contra los efectos adversos de los productos químicos en la salud humana y el medio ambiente. El valor educativo que permite el uso seguro de productos químicos que son importantes para el funcionamiento de toda la industria juega un papel importante aquí.
